“…Según Salkovskis y Clark (1993) estas diferencias se refieren al tipo de síntomas físicos mal interpretados, al curso temporal asignado a la enfermedad temida, a las conductas disfuncionales asociadas a las interpretaciones, y a las creencias negativas sobre la salud, la enfermedad y las actuaciones médicas. En los últimos años se han llevado a cabo diversas investigaciones con el propósito de analizar el patrón interpretativo tanto de la hipocondría como del trastorno por angustia (p.ej., Ahmad, Wardle y Hayward, 1992;Clark, Salkovskis, Gelder, Koehler, Martin, Anastasiades, Hackmann, Middleton y Jeavons, 1988;Clark, Salkovskis, Óst, Breitholtz, Koehler, Westling, Jeavons y Gelder, 1997;Harvey, Richards, Dziadosz y Swindell, 1993;Hitchcock y Mathews, 1992;Kamieniecki, Wade y Tsourtos, 1997;MacLeod et al, 1998;Marcus, 1999;Martínez et al, 1995;McNally y Foa, 1987;Salkovskis, 1990). No obstante, los resultados obtenidos en estos estudios no siempre han coincidido.…”