Las ventanas inteligentes se vislumbran como una solución amigable con el ambiente para abordar un problema asociado con el calentamiento global: las altas temperaturas en interiores. Estos dispositivos están diseñados específicamente para bloquear cierto tipo de radiación solar que es dañina y/o indeseable al añadir componentes a los vidrios convencionales. Una de estas radiaciones indeseables es la temida radiación ultravioleta (UV), la cual está relacionada con padecimientos tan graves como lo es el cáncer de piel. Sin embargo, no es la única. Otra radiación que ha adquirido gran relevancia es la radiación infrarroja (IR), que es la responsable de la sensación de calor. Las ventanas inteligentes tienen el propósito de actuar como filtros, bloqueando ciertos tipos de luz, como la luz UV, visible o la IR. Al bloquear la luz IR, estas ventanas se convierten en aislantes térmicos, evitando que el calor penetre al interior de inmuebles, automóviles u otros espacios durante las estaciones cálidas del año. Esta disminución de las temperaturas interiores se lograría sin gastos económicos extra, al igual que no se utilizaría ningún tipo de energía proveniente de fuentes fósiles. En este trabajo se darán a conocer distintos materiales con potencial para aplicarse en ventanas dinámicas inteligentes.