Las políticas institucionales de la educación superior están impulsando las prácticas de atención a la diversidad en numerosas regiones del mundo, pero no lo están haciendo desde significados unívocos ni tampoco probablemente en coordinación con las comprensiones de la diversidad que mantienen los diferentes colectivos de la comunidad universitaria. Desde esta hipótesis de partida, el artículo se halla orientado a revisar la investigación reciente sobre las perspectivas en torno a la diversidad que se derivan, por una parte, del discurso de los líderes y de la documentación institucional de las universidades y, por otra, de la información proporcionada por el personal docente e investigador, con el fin de identificar convergencias y desencuentros en el seno de los ámbitos decisorio y práctico, así como entre ambos. Los resultados de los estudios revisados sugieren que, en la educación superior, las concepciones sobre diversidad del liderazgo institucional de alto nivel son parciales y mayoritariamente no críticas, pero son priorizadas en su traslación a la práctica con escasa resistencia por parte del profesorado, cuyas creencias sobre diversidad no se caracterizan, en general, por demasiada consistencia ni compromiso, salvo en determinadas minorías que cuentan con el apoyo de líderes intermedios, pero cuya efectividad se difumina en ocasiones en las dinámicas institucionales. Aunque, en términos generales, las políticas de las universidades occidentales ya reconocen desde hace tiempo las diferencias intergrupales y orientan la implementación de actuaciones en materia de diversidad, siguen careciendo de un liderazgo proactivo con una comprensión holística y crítica de la diversidad que impulse un conocimiento y una conciencia más compartida en la comunidad universitaria sobre las necesidades de todos los grupos y personas vulnerables.