“…Dentro de los procedimientos del fonoaudiólogo en sala de urgencias, se mencionan la detección, evaluación e intervención en alteraciones deglutorias, que permita direccionar hacia una hospitalización, exámenes dinámicos de la función deglutoria, o estrategias de acompañamiento a cuidadores y familiares para un egreso seguro (Cassarino, y otros, 2019); (Jeyaseelan, Vargo, & Chae, 2015); (Lynch, Luker, Cadilhac, & Hil, 2015); (Sung, Lee, Choi, & Kim, 2018). Dada la necesidad inmediata para tomar decisiones clínicas conjuntas, se orientan estrategias hacia el cuidado de la cavidad oral, maniobras deglutorias y técnicas de alimentación segura, con cambios posturales y modificación de consistencias en los alimentos (Bahcecı, Umay, Gundogdu, Gurcay, Ozturk, & Alıcura, 2017); (Carmignani, y otros, 2018); (Winck, Camacho, & Ambrosino, 2015). Así, la presencia del fonoaudiólogo permite una evaluación clínica precisa para la identificación rápida de signos y riesgo de disfagia, y un plan de rehabilitación inmediato para la deglución por medio de estrategias específicas, en acuerdo con otros profesionales (Almeida, Mahmud, & Finard, 2018); (Bahcecı, Umay, Gundogdu, Gurcay, Ozturk, & Alıcura, 2017); (Lal, Wishart, Ward, Schwarz, Seabrook, & Coccetti, 2020).…”