INTRODUCCIÓNLas enfermedades mielodisplásicas/mieloproliferativas (SMD/SMP) constituyen neoplasias clonales hematopoyéticas que reúnen características clínicas, de laboratorio y morfológi-cas que apoyan un diagnóstico tanto de síndrome mielodisplási-co como de síndrome mieloproliferativo. Dentro de este grupo de hemopatías malignas, la clasificación OMS de los tumores hematopoyéticos y de los tejidos linfoides reconoce tres enfermedades con criterios definidos (leucemia mielomonocítica crónica, leucemia mieloide crónica atípica y leucemia mielomonocítica juvenil) y una cuarta, denominada enfermedad mielodisplásica/mieloproliferativa inclasificable, no encuadrable en las anteriores (1). Aunque no existen trabajos con una casuística amplia que describan las características clínicas y evolutivas de esta última entidad (2), es un hecho conocido la asociación de las enfermedades mielodisplásicas con complicaciones de tipo infeccioso (3). Sin embargo, la infección por Mycobacterium tuberculosis, local o diseminada, es muy infrecuente en pacientes con síndrome mielodisplásico, y las publicaciones que recogen esta asociación son ocasionales (4). Describimos a continuación el caso de un paciente diagnosticado de SMD/SMP inclasificable que presentó en su evolución un cuadro de tuberculosis diseminada que inicialmente simulaba una carcinomatosis peritoneal.
CASO APORTADOVarón de 68 años de edad, con antecedentes personales de nefrectomía derecha por carcinoma renal de células claras, litiasis renal, hiperplasia prostática benigna y herpes zóster de repetición. En [0212-7199 (2008)
RESUMENPresentamos el caso de un paciente de 68 años diagnosticado de sín-drome mieloproliferativo/mielodisplásico inclasificable (clasificación OMS), con tratamiento corticoesteroideo prolongado y mala respuesta a terapia citorreductora, que presenta en su evolución un cuadro clínico de astenia progresiva, dolor torácico, disnea a mínimos esfuerzos y distensión abdominal, que hace sospechar inicialmente una rotura esplénica. La laparotomía exploradora pone de manifiesto la existencia de implantes peritoneales múltiples, y la biopsia de éstos es diagnóstica de tuberculosis peritoneal. A ello se añade la positividad del cultivo y la PCR en orina, para Mycobacterium tuberculosis, y la posibilidad de probables afectaciones tuberculosas pleural y esplénica. La respuesta al tratamiento antituberculoso fue favorable. No hemos encontrado en la literatura revisada un caso de características similares.