El trabajo analiza la práctica de escritura en situación de clandestinidad y cautiverio, a partir de un corpus constituido por dos poemas manuscritos de la autora Ana María Ponce (2011), desaparecida en la última dictadura militar argentina (1976-1983); y dos poemas escritos por Carmen Berenguer (1983), durante la dictadura de Pinochet en Chile (1973-1990).
En esta línea, se piensa en los poemas como “eventos de escritura” para elaborar una interpretación compleja sobre: a) los participantes/destinatarios b) el lugar/tiempo (en tanto las condiciones de producción de los poemas resignifican lo escrito) d) los elementos gráficos (espacialidad, relaciones sinápticas, signos al margen) (Cardona, 1991; Percia, 2016). Además, se realizará un análisis discursivo/enunciativo de los poemas, a fin de caracterizar el sentido del acto de escritura en condiciones desubjetivantes de privación de la libertad y tortura (Barzani, 2018; García, 2018; Zerillo, 2014; Benveniste, 1971; Agamben, 2000; Arendt, 1993).
Chile y Argentina han sido el escenario de producciones escritas testimoniales en situación de marginalidad durante sus últimas dictaduras militarizadas (González Ruiz, 2019; Guillard, 2019). En este sentido, el poema, considerado una “escritura expresiva” (Paglieta, 2016), adquiere carácter autobiográfico, y estructura la vivencia a partir del uso metafórico. La voz poética da lugar a una “escritura reparadora” (Zerillo, 2014), donde la construcción de campos de sentido genera “efectos perlocutivos” en las personas que atraviesan graves dolencias subjetivas.