El primer agradecimiento es, sin duda, para mi director de tesis, Miguel Ángel. Y no sólo porque jamás he recibido por su parte un "estoy ocupado", o un "ahora no puedo atender esto", o ni tan siquiera un "espérate un minuto". Todo lo contrario. Me consta que siempre que ha podido ha antepuesto las cuestiones relativas a mi tesis, tanto científicas como administrativas, a muchas de sus tareas como Profesor Titular. Además, siempre ha sabido dar valor a cualquier idea que haya surgido sin descartarla, por muy ilusa que pudiera parecer, y otorgado la libertad para desarrollarla. Sin duda, su dedicación, accesibilidad y flexibilidad han hecho que la realización de esta tesis me fuera más llevadera. Pero por encima de todo, lo que ha hecho que esta tesis llegue a buen puerto ha sido su confianza en mí.También me gustaría agradecer a Mari Carmen todo lo que me ha ayudado. Su eficiencia en las tareas administrativas es encomiable. Pero hay algo mucho más importante que aunque no forme parte de su trabajo ha sabido hacer: decirme esas palabras de ánimo y apoyo en el momento en que justo más las necesitaba.Darle las gracias a Juan Zapata por darme la oportunidad de entrar a formar parte de un grupo científicamente tan reconocido, aún cuando ni tan siquiera me conocía, y por ser la voz de la experiencia a través de sus valiosos consejos. Y, por supuesto, a Jesús Rubio, por todas las horas que nos hemos pasado al teléfono hablando y debatiendo sobre los dichosos modos esféricos. Su ayuda ha servido, sin duda, para salir de varios atolladeros que ha deparado la investigación.Como no, un muy especial agradecimiento a mis compañeros de doctorado que han recorrido o están recorriendo el mismo camino, desde los primeros que conocí hasta los más nuevos que han llegado por el Departamento últimamente. Pero en particular, para Javi, Edu, Manolo y Jose, con los cuales he compartido la mayoría de estos 4 años, y que han hecho que las veces que pasaba por allí tuviesen un corte agradable.Finalmente, mi más sincero agradecimiento al resto de gente del Departamento. Profesores como Joserra, Encinar, Rebo, Chemari, Mariano, Page, Manu, Jaime, Alejandro o Jesús, técnicos como Fernando o Teo, además de toda la gente que he nombrado anteriormente, hacen que se me antoje difícil pensar en un grupo de personas que aúnen a la par no sólo la calidad científica sino la calidad humana del Departamento.Esta tesis también ha sido posible gracias a la disposición del profesor Thomas Zwick, de Alemania, quien me dio la oportunidad de realizar una estancia de investigación en su instituto. Me gustaría agradecer a toda la gente de allí la hospitalidad que demostraron, ya que hicieron que unos cuantos meses en un país del que ni tan siquiera conocía el idioma pasaran más rápido de lo que inicialmente imaginé. Además del lobby polaco, no puedo dejar de agradecer a Juan Pontes y a su esposa su dedicación desde el primer momento v vi en que pisé suelo alemán. No sólo gané un colaborador científico, sino un gran amigo.En el plano más personal, por muy típi...