“…Algunos autores han considerado la posibilidad de que las características mencionadas (la fragilidad de las vasijas cerámicas, su peso y el tiempo necesario para su confección), puedan ser limitantes al momento de su incorporación por parte de las sociedades móviles (Arnold, 1985). Otros investigadores, en cambio, sostienen que la movilidad no sería un impedimento para su incorporación, si bien impondrá ciertas restricciones, influyendo en los modos de fabricación y uso de estos instrumentos, así como en su tamaño y peso, que tenderán a disminuir al aumentar la movilidad residencial (Bright & Ugan, 1999;Eerkens, 2003Eerkens, , 2008Eerkens et al 2002;Rice, 1987;Simms et al 1997;Skibo et al 1989). Simms et al (1997) postularon que la inversión de tiempo y energía realizada en la elaboración de contenedores cerámicos, está condicionada por el tiempo de uso de estos y, por lo tanto, se verá afectada por el grado de movilidad residencial, la redundancia ocupacional y la presencia o no de un sistema logístico de uso del espacio.…”