“…La utilidad taxonómica de la anatomía foliar de Poaceae ha sido ampliamente reconocida en la literatura agrostológica, especialmente a nivel de subfamilia (Prat 1932, 1936, 1948, 1961, Tateoka et al 1959, Metcalfe 1960, Baum 1971, Ellis 1979, Matthei 1982, Arriaga 1983, Peterson et al 1989, Zuloaga et al 1993, Herrera & Grant 1994, Baeza 1997. Tanto la epidermis abaxial de la lámina foliar (Tateoka et al 1959, Stewart 1965, Barkworth 1981, Aiken & Lefkovitch 1984, Dávila & Clark 1990, Baeza 1997, como la epidermis de la lígula (Chaffey 1983(Chaffey , 1984(Chaffey , 1985(Chaffey , 1994) y de las brácteas de la espiguilla (glumas, lemmas y páleas) (Clark & Gould 1975, Terrel & Wergin 1981, Terrel et al 1983, Thomasson 1978, 1986, Acedo & Llamas 2001, Finot et al 2006, han sido reconocidas como una fuente importante de caracteres con valor taxonómico, y utilizadas en muchos casos para distinguir géneros y delimitar especies.…”