“…La terapia ocupacional consiste en la prevención o disminución de aquellos obstáculos que aparecen como consecuencia de un trastorno psíquico, físico, social o sensorial que impide que una persona se desenvuelva de manera independiente, y busca la restauración de la función perdida por medio de la mejora de las capacidades residuales y realizando la adaptación del medio a las necesidades de la persona (156,157). La OMS describe la profesión como un "conjunto de técnicas, métodos y actuaciones que, a través de actividades aplicadas con fines terapéuticos, previene la enfermedad y mantiene la salud, favorece la restauración de la función, suple las deficiencias incapacitantes y valora los supuestos del comportamiento y su significación profunda para conseguir las mayores independencia y reinserción posibles del individuo en todos sus aspectos: laboral, mental, físico y social" (158).…”