“…Fomentar la metacognición en el aula involucraría, entre otras cosas, desarrollar juicios reflexivos, la habilidad de auto-corrección, la reflexión sobre el conocimiento que está implícito en la acción, el reconocimiento de las propias capacidades y limitaciones, así como la explicitación y discusión de los sesgos cognitivos (López Aymes, 2012;Norabuena et al, 2017). De esta manera, fomentar procesos metacognitivos en el aula aportaría al desarrollo de un pensamiento crítico (Ford y Yore, 2012;Hogan et al, 2015;Tamayo Alzate, 2014;Torres y Solbes, 2018).…”