“…Es importante investigar el consumo en los jóvenes, debido a que conocer los factores de riesgo relacionados con el consumo permite realizar actividades de promoción y prevención en este grupo etario (Méndez Garrido & Azaustre Lorenzo, 2016). La percepción que los jóvenes tienen del funcionamiento familiar puede influir en la adopción de conductas de riesgo para la salud (adicciones, relaciones sexuales de riesgo, pandillerismo), pero la familia que posee alta comunicación, buena adaptabilidad, relación positiva y un amplio vínculo afectivo entre padres e hijos genera menos probabilidad de consumo de alcohol en los jóvenes universitarios, relacionado a que la familia es un subsistema social transmisor de conocimientos, valores, actitudes, roles y hábitos (Ahumada-Cortez, Gámez-Medina, & Valdez-Montero, 2017; Alonso-Castillo, Un-Aragón, Armendáriz-García, Navarro-Oliva, & López-Cisneros, 2017;Trujillo-Guerrero, Vázquez-Cruz, & Córdova-Soriano, 2016).…”