“…En general, la inclusión laboral de personas con discapacidad esta impregnada por una cadena de imaginarios, estereotipos o modelos que condicionan las posibilidades de vinculación, aun cuando abunden normas y legislaciones especializadas; de allí la necesidad de examinar cómo está reglado por la ley y la sociedad a partir de sus construcciones y representaciones colectivas (Sabogal, 2014) Sobre este particular (Molina, Mora de Bedoya, & Yolimar, 2011) señalan la necesidad de promover acciones permanentes y compromisos específicos para la inclusión de las personas con discapacidad, estableciendo plazos para logros en cuanto a adaptaciones en los sistemas de ingreso, adecuaciones curriculares, instalación de servicios de apoyo, eliminación de barreras arquitectónicas y comunicacionales, capacitación y formación de personal. Con esto se busca una mejor capacitación y una menor deserción universitaria, asegurando un alto rendimiento laboral, promoviendo una oferta laboral apetecida al empresario Huilense.…”