“…También muy prevalente ha sido el diagnóstico de retraso madurativo, el cual se da en niños/as que muestran retrasos significativos en una o más áreas del desarrollo, en comparación con los pares de la misma edad. A veces, estos niños/as reciben este diagnóstico a la espera de lograr los hitos evolutivos del desarrollo (Taboada et al, 2020), de manera que, en ocasiones, se les proporciona atención temprana mediante un equipo multidisciplinar formado por logopedia, terapia ocupacional, pediatría, neurología, psiquiatría y/o psicología para el abordaje precoz de estos retrasos madurativos (Onandia-Hinchado, 2022;Wallis et al, 2020). Respecto a los signos de alarma que facilitan una detección y un diagnóstico temprano han sido, en primer lugar, la ausencia del lenguaje y, en segundo lugar, el retraso del desarrollo, siendo estos signos de alarma los primeros en identificarse por las familias (Llorca Linares, 2019).…”