RESUMENIntroducción: En los últimos años son numerosos los trabajos acerca de las posibles causas del alcoholismo, donde parece intervenir varios factores, siendo la herencia uno de los más implicados, aunque se han destacado otros, como factores ambientales, que contribuirían a aumentar o disminuir el riesgo individual para desarrollar una dependencia alcohó-lica.Método: Para intentar aclarar la posible influencia de la herencia en el alcoholismo, hemos estudiado los niveles de beta-endorfinas (β-E) en 25 familias de alcohólicos, en las cuales había 27 hijos con un padre alcohólico y 7 hijos con los dos, así como en dichos padres alcohólicos, y comparado los resultados con unos grupos control: uno de adultos no bebedores y otro de niños normales en familias de no-bebedores, con edades similares.Resultados: Se ha encontrado que los hijos de alcohólicos tienen unos niveles de β-E significativamente más bajos (p < 0,001) que los controles, y estos niveles eran aún más bajos en los hijos cuyos dos padres eran alcohólicos.Conclusión: Se concluye que la determinación de β-E podía tener un valor predictivo a la hora de determinar quién es más propenso a ser alcohólico en el futuro.