“…Derivado de los efectos adversos del COVID-19, además de las medidas sanitarias de salud pública recomendadas por la OMS, tales como la cuarentena, el aislamiento y el distanciamiento (OMS, 2020c), instancias internacionales impulsan acciones y recomendaciones orientadas a resarcir los daños ocasionados, entre ellos están los apoyos como préstamos, donativos, suspensión de deuda y otras inversiones a determinados países, además recomiendan estímulos fiscales para servicios sanitarios, así como protección laboral, estrategias de apoyo a poblaciones vulnerables, aseguramiento de liquidez del sistema bancario, cooperación internacional y entre organizaciones, eliminación de penalizaciones, colaboración y coordinación en materia de políticas entre países (Zepeda et. al., 2020).…”