“…Algunos estudios recomiendan que las estrategias de promoción de la salud cardiovascular se deben iniciar en las escuelas e incluso en los centros de cuidado preescolar, por ser la forma más efectiva de promover los comportamientos saludables (Macias et al, 2012;Céspedes et al, 2013;Larson et al, 2011;Nava, Pérez, Herrera, & Hernández, 2011;Peñalvo, Sotos-Prieto, Santos-Beneit, Pocock, Redondo et al, 2013;Sigman-Grant, Byington, Lindsay, Lu, Mobley et al, 2014;Tarro, Llauradó, Albaladejo, Moriña, Arija et al, 2014). Por esta razón, es urgente identificar las intervenciones efectivas en este grupo etario específico a fin de prevenir sobrepeso y obesidad (Larson, Ward, Neelon, & Story, 2011;Sigman-Grant et al, 2014;Monasta, Batty, Macaluso, Ronfani, Lutje et al, 2011). Varios países han puesto en marcha programas de intervención en preescolares, escolares y adolescentes para promocionar hábitos de alimentación saludables y de actividad física en ambientes apropiados para el óptimo crecimiento y desarrollo de los niños (Peñalvo et al, 2013;Sigman-Grant et al, 2014), así como para prevenir un estado nutricional inadecuado (Céspedes et al, 2013).…”