This doctoral thesis is a historical-critical discourse on the architecture of Quito between 1954 and 1960. It is based on different local voices expressed in word and deed about the city and its architecture in the context of Quito's modernization and improvement with a view to being a (worthy) venue for the 11th Inter-American Conference of 1959; an international event that did not take place. The preparations for the conference activated -in the field of architecture- the dichotomy between the traditional and the modern discourses when deciding the strategies to make the city a 'worthy venue' for the event and with a high international tourist potential. At the same time, debates were stimulated on spatial and building topics linked to the areas of legislation, professionalization, industrialization, and financing, as well as on the "way of being urban" or the sense of the urban. Interconnected fields, in which the power-identity-memory mechanisms were reproduced and expressed by acquiring a specific form in architecture and in urban configuration.
From these considerations, the study interval is subdivided into two periods. The first consisted of a period of preparation, between March 1954 and January 1958, with the populist government of Jose Maria Velasco Ibarra (1954-1956) who spoke in favor of cleaning up the capital to host the Conference. This continued with the first year of the social-Christian government of Camilo Ponce Enriquez (1957-1958), who set out to modernise the city with the same aim. The second period occurred between 1958 and 1960, which corresponds to the continuation of the government of Ponce Enriquez. This period culminates with the inauguration of the modern works, which were erected by the regime to welcome the delegations that would attend the planned 11th Inter-American Conference. The critical analysis of the proposals acquires meaning in the socio-political scenario of each government and of the existing relations of kinship and friendship. The analysis is also careful to establish the projects genesis in the framework of power relations present in the professional team conformation, land selection and purchase, relationship with the municipality and with the Regulatory Plan office, among others. Finally, reflection has been made on the symbolic meaning that the governing authorities intended to transmit to citizens through the materiality of the projected, constructed buildings and of official discourses of the time.
From the need to find and put into discussion understanding of those who were not linked or ingratiated with power, this story is structured based on the traces left in either discursive or built forms.
This work puts projects the influence the official discourses and practises of the time period studied had in trends of professionalisation, unionisation and legitimization in the fields of architecture and urbanism. This projection demonstrates how those years were the turning point in a struggle within the field in relation to the architecture and urban planning, along with its possible incidence in the configuration of identity and urban memory. In this context, the study reconstructs the scenarios within which those discourses were carried out. The possible effects the speeches had are established, in addition to analysing the possible reasons they were excluded from official discourse and citizen memory. The geographic demarcation covers the entire city of that time, bringing to light specific interventions in the city which at that time was growing in a dispersed, fragmentary and sparkling manner.
Esta tesis doctoral es un discurso histórico-crítico sobre la arquitectura de Quito entre 1954 y 1960; se sustenta en diferentes voces locales que se expresaron en obra y palabra- sobre la urbe y su arquitectura en el contexto de adecentamiento y modernización de Quito con miras a ser una sede (digna) para la XI Conferencia Interamericana de 1959, evento internacional que no se realizó. Los preparativos para la conferencia activaron -en el campo de la arquitectura- la dicotomía entre lo tradicional y lo moderno al momento de decidir las estrategias para hacer de la ciudad una 'sede digna' para el evento y con alto potencial turístico internacional. Al mismo tiempo, estimularon debates sobre tópicos espaciales y edilicios vinculados a los ámbitos de la legislación, profesionalización, industrialización, y financiación, así como sobre la "forma de ser urbana" o el sentido de lo urbano. Campos interconectados, en los que los engranajes poder-identidad-memoria se reproducen y expresan adquiriendo una forma específica en la arquitectura y en la configuración urbana. A partir de estas consideraciones, el intervalo de estudio se subdivide en dos periodos. El primero, entre marzo de 1954 y enero de 1958, de preparación, implica al gobierno populista de José María Velasco Ibarra (1954-1956) quien se pronunció a favor de adecentar la capital para que sea sede de la Conferencia; y, al primer año del gobierno social-cristiano de Camilo Ponce Enríquez (1957-1958) quien consideró modernizar la ciudad con el mismo fin. El segundo periodo, entre 1958 a 1960, de construcción, corresponde a la continuación del gobierno de Ponce Enríquez, y culmina con la inauguración de las obras modernas erigidas por el régimen, para acoger a las delegaciones que asistirían a ese evento internacional. El análisis crítico de las propuestas adquiere sentido en el escenario sociopolítico de cada gobierno y de las relaciones de parentesco y amistad existentes, cuidando de establecer la génesis de los proyectos en la trama de relaciones de poder presente en la conformación del equipo de profesionales, selección y compra de predios, relación con la municipalidad y con la oficina del Plan Regulador, entre otros. Por último, se reflexiona sobre el sentido simbólico que los gobernantes pretendieron transmitir a la ciudadanía a través de la materialidad de las edificaciones proyectadas y construidas y de los discursos oficiales. A partir de la necesidad de hallar y poner en discusión las miradas de quienes no estaban vinculados ni se congraciaban con el poder, se estructura un relato basado en las huellas que quedaron ya sea bajo formas discursivas o prácticas. En este trabajo se reflexiona sobre la proyección que tuvieron estos discursos y prácticas en la profesionalización, agremiación y legitimación de tendencias en el campo de la arquitectura y el urbanismo, para demostrar que esos años fueron el momento de inflexión en la lucha dentro del campo en el que se definieron las formas de acción en relación con la arquitectura y la traza urbana y su posible incidencia en la configuración de la identidad y la memoria urbana. Para esto se reconstruyen los escenarios de discusión y participación en los que esos discursos fueron enunciados; se establece los posibles efectos que lograron; y, se analizan las razones para su exclusión del discurso oficial y de la memoria ciudadana. La demarcación geográfica abarca la totalidad de la ciudad de ese entonces y rescata intervenciones puntuales en la ciudad que en ese momento crecía de manera dispersa, fragmentaria y en destellos.