Cuando se aplica un método de tamizaje de modo excesivo, abusivo o innecesario los daños provocados pueden superar a los beneficios. Para desarrollar el concepto de tamizaje excesivo, fueron consideradas algunas categorías: tamizaje innecesario, sin indicación médica, inducido, obligatorio, por frecuencia inadecuada. Existen sesgos de interpretación que no permiten determinar de forma objetiva el balance daño beneficio de los programas de tamizaje relacionados al exceso de diagnóstico. Evitar el daño producido por tamizajes excesivos (overscreening) requiere llevar recomendaciones y pautas genéricas al terreno de la práctica clínica con casos particulares. La prevención cuaternaria, fundada conceptualmente en los cuidados de salud centrados en la persona, permite considerar las creencias, inquietudes, opciones individuales, haciendo posible llevar a la prevención a una escala humana.