Los escenarios educativos son espacios propicios para pensar cómo la innovación pedagógica es una oportunidad para replantearse la enseñanza y el aprendizaje, de tal manera que respondan a la necesidad de transformar el conocimiento y la realidad presente en las aulas de clase, es decir, la diversidad de pensamientos, saberes, experiencias, intereses, culturas y trayectorias dentro de un marco inclusivo. Este trabajo tiene como finalidad presentar una propuesta de enseñanza y aprendizaje desde la elaboración de proyectos construidos en función de progresiones curriculares, implementados en aulas flexibles y dinámicas, donde las interacciones, el diálogo y el trabajo colaborativo cobran un nuevo sentido y valor. Así, al eliminar las barreras contextuales, pueden emerger prácticas innovadoras que integran el conocimiento, y buscan romper con la mirada asignaturista y segregadora presente y arraigada en nuestras escuelas. A través de un enfoque cualitativo y bajo la técnica de análisis documental, se recogen y analizan experiencias de aprendizaje que responden a proyectos elaborados bajo la metodología del Aprendizaje basado en problemas y que articulan de manera progresiva el currículo. Por otro lado, se recogen las percepciones de docentes que implementaron la experiencia, poniendo en tensión la enseñanza tradicional y las innovaciones implementadas. Los resultados dan cuenta de la relevancia que cobra el trabajo colaborativo para diseñar e implementar metodologías de enseñanza para la inclusión y que tiene como motor la articulación y progresión del currículo, la propuesta muestra la factibilidad de tener aulas activas, donde la experiencia y el aprendizaje mediado son posibles como consecuencia de una sinergia continua.