Objetivo. Determinar si la edad es un factor importante en la prestación de los servicios de teleconsulta por parte de los profesionales de salud, mediante una revisión de la literatura disponible.
Materiales y métodos. En las bases de datos se encontraron 34.000 resultados. Se escogieron 50 artículos donde se mencionaba la teleconsulta. El mayor número de investigaciones se llevó a cabo en Estados Unidos, España, Australia, India y Suecia. Se tuvieron en cuenta criterios de inclusión y exclusión.
Resultados. En los 50 artículos seleccionados se pudieron establecer cinco categorías: normatividad, importancia de la telemedicina, grupos de edad, factores diferenciales y aceptabilidad por parte de los profesionales de la salud. Se evidencia que los adultos mayores son menos tolerantes a los cambios y a la adherencia a las nuevas tecnologías comparados con los pacientes en edades pediátricas. Sin embargo, son los primeros quienes utilizan con mayor frecuencia los servicios de teleconsulta dado los requerimientos frecuentes de asistencia propios de la edad adulta. Además, en los adultos mayores que necesitan de personal cuidador la atención se vio limitada porque este no ofreció los datos requeridos por dificultad en el uso de los dispositivos tecnológicos.
Conclusiones. Esta investigación demuestra que la edad puede comportarse como un factor determinante en la atención por teleconsulta, sobre todo la edad adulta en la que ocurren los cambios fisiológicos propios de la senectud y el requerimiento de acompañantes permanentes se convierte en una necesidad. La escasa adherencia a nuevas tecnologías, secundaria a limitaciones físicas y motrices, impiden una consulta efectiva desde la virtualidad en tal grupo etario.