La transición al siglo XXI ha supuesto una reactivación demográfica en toda España, tras un periodo de estancamiento generalizado. La causa principal radica en una última oleada de inmigración, tanto laboral como residencial, sobre todo en el área mediterránea, siendo la Región de Murcia uno de los lugares de mayor atractivo. Las áreas más afectadas han sido aquellas donde más se han desarrollado la agricultura, la industria y el turismo. La comarca del Campo de Cartagena, en relación a este desarrollo, forma parte de los lugares con mucha inmigración recibida. Entre las múltiples implicaciones territoriales de este fenómeno, es destacable la nueva configuración del poblamiento. Es objetivo principal de este trabajo demostrar el papel de la inmigración en el mantenimiento e incluso crecimiento de entidades rurales de población. Para ello, se hace un tratamiento estadístico, para los municipios del Campo de Cartagena, de los datos del Padrón según entidades de población y nacionalidad al principio del siglo (año 2000) y en la actualidad (año 2014), que se analizan y se cartografían. Se concluye que, sin esta nueva población inmigrante instalada en localidades rurales, muchos pueblos de la comarca quedarían reducidos a su mínima expresión e incluso algunos semiabandonados. Las áreas no rurales también reciben inmigración, pero en su devenir demográfico no se muestra tan significativa la población extranjera.