A pesar de su incidencia declinante a partir de la segunda mitad del siglo XX, el cáncer gástrico sigue representando la segunda causa de muerte por cáncer, tras la ocasionada por el de pulmón 1 . Los factores pronósticos para este tumor se pueden clasificar en dos grandes grupos: los factores pronósticos convencionales y los biológicos. Dentro de los factores del primer grupo están los que dependen del paciente y del tumor, así como los relacionados con el tipo de tratamiento. Con respecto a este último tipo de factor, y considerando que el tratamiento más efectivo para este tipo de tumor es el quirúrgico, resulta absolutamente clave para lograr una resecabilidad completa del tumor (R0, de acuerdo a la UICC: no tumor residual macroscópico, ni microscó-pico tras la cirugía). Sin embargo, como se puede apreciar en la Figura 1, aun en los casos quirúrgicamente resecables, la probabilidad de supervivencia a los cinco años apenas supera el 40%. Es más, la probabilidad de supervivencia libre de enfermedad es muy similar a la de supervivencia global, lo que da una idea de la agresividad biológica de estos tumores. Por ello, resulta importante en la práctica clínica, la consideración de factores pronósticos que nos permitan una evaluación más óptima de la agresividad de los carcinomas gástricos resecables quirúrgicamente, y que también posibiliten el establecimiento de nuevas dianas terapéuticas.
Factores pronósticos clásicosEntre los factores pronósticos convencionales que han sido evaluados en el cáncer gástrico, se encuentran la edad y sexo de los pacientes, la localización tumoral, configuración macroscópica del tumor, estadio tumoral, tipo y grado histológico. El estadio tumoral, de acuerdo con la clasificación TNM, que es la más empleada en occidente, es el factor pronóstico más importante en los carcinomas gástricos resecables. La localización tumoral en cardias y en muñón gástrico de pacientes que fueron sometidos a gastrectomía parcial por enfermedad ulcerosa, también está asociada con un peor pronóstico. En general, la mayoría de los estudios indican que la configuración macroscópica del crecimiento de tipo linitis plástica (clasificación de Borrmann), el grado histológico indiferenciado, el tipo histológico difuso (criterios de Lauren), así como aspectos histopatológicos tales como la invasión vascular, perineural o linfática, se asocian con un peor pronóstico del cáncer gástrico resecable. De todos esos factores, en un estudio realizado sobre 151 pacientes con cáncer gástrico resecable que fueron sometidas a un período medio de seguimiento clínico de 36,6 meses (mediana: 24 meses) en los Hospitales Central de Asturias, de Oviedo y de Jove, de Gijón, tan sólo el estadio tumoral (p=0,00001), la localización tumoral (p=0,005) y el tipo histológico de los tumores (p=0,004) estuvieron significativamente asociados con la supervivencia de los pacientes.43