En este estudio se evalúan la conducta antisocial y los principales factores de riesgo presentes en una muestra de 428 adolescentes argentinos de la provincia de Córdoba, tanto varones como mujeres. Para ello se toma como base el Modelo del Triple Riesgo Delictivo (TRD) (Redondo, 2008, 2015), que sugiere la existencia de tres fuentes criminógenas principales que operan en interacción: riesgos personales, carencias sociales y exposición a oportunidades delictivas. Los resultados obtenidos confirman, en primer lugar, que los varones tienen una participación delictiva muy superior a la de las chicas; en segundo, que existen diversas similitudes a la vez que también algunas diferencias entre mujeres y varones, por lo que se refiere a la influencia y capacidad predictiva de los diversos factores de riesgo aquí analizados. En concreto, aunque algunos de los factores de riesgo incluidos en el estudio (p. e. pares antisociales, consumo de sustancias y pobre parentalidad) fueron útiles para explicar el comportamiento antisocial tanto de varones como chicas, la magnitud de varianza explicada por ellos fue superior para el caso de los varones. Los hallazgos del estudio apoyan empíricamente algunas de las propuestas del Modelo TRD, a la vez que sugieren que las evaluaciones e intervenciones sobre el comportamiento antisocial y sus factores de riesgo deberían tomar en cuenta las diferencias por sexo.