“…Las imágenes desempeñan un rol fundamental en la identificación y detección de la patología, tomándose en cuenta diferentes métodos para el diagnóstico idóneo, como lo son radiografías convencionales, Tomografía Computada (TC) , Tomografia Computarizada de Haz Cónico (TCHC) y la imagen por Resonancia Magnética (IRM) , gammagrafía ósea con radionucleócidos , biopsias óseas, disponibles para clínicos y radiólogos, sin embargo, al desconocer las características e indicaciones de cada uno, pueden ser causa de confusiones e incluso generar conflictos para realizar el tratamiento de la patología o complicación de la misma (1,4,5,7,10,14).…”