“…Sin embargo, hasta fechas recientes, los avances en la teoría migratoria han sido más modestos. Ello se debe, han sostenido diversos autores, a la continuidad de la fragmentación disciplinar en este panorama académico (Bretell y Hollifield, 2008), así como a la dificultad para acuñar teorías globales y de amplio alcance en un contexto de creciente complejidad y de diversificación de los tipos de flujos, incluidos los de refugiados (Arango, 2004;Van Hear, 2010;King, 2012;Bloch, 2020). A pesar de ello, desde el cambio de siglo, se ha observado una transformación teórica relevante que surge, inicialmente, de la introducción de dos nuevos paradigmas conceptuales que han dominado la investigación en este campo: el transnacionalismo y el denominado «giro de la(s) movilidad(es)» (Urry, 2007;Glick Schiller, Basch y Blanc-Szanton, 1992).…”