A partir de la teoría de los sistemas de migración formulada por Oliver Bakewell (2010, 2013), el artículo argumenta la existencia de un sistema de migración colombiano. Este se estructura con base en la configuración histórica de tres elementos: a) flujos, de personas, ideas y bienes; b) instituciones, en el sentido de discursos y prácticas asociadas; y (c) estrategias, que responden tanto a dinámicas normativas como derivadas del entorno en el que se gesta el fenómeno migratorio contemporáneo. En su configuración se toman en cuenta lógicas económicas y políticas, pero también prácticas culturales, en medio del proceso de transición de Colombia como una sociedad de emigración pura, a ser un país de inmigración, tránsito y retorno.