“…El trastorno por estrés postraumático es una de estas consecuencias psicológicas, frecuentemente estudiada, en menores víctimas de las atrocidades de la guerra (Haroz et al, 2013;Hobfoll, Mancini, Hall, Canetti & Bonanno, 2011;Mels, Derluyn, Broekaert & Rosseel, 2009;Rieder & Choonara, 2012;Yule, Dyregrov, Raundalen & Smith, 2013;Ziaian, De Anstiss, Antoniou, Baghurst & Sawyer, 2012), de la violencia interpersonal en general y de los atentados terroristas en particular Hasanovic, 2011;Tol et al, 2012). Ser testigo o víctima de violencia se ha vinculado con problemas de conducta de tipo internalizado, evidenciados más en las niñas, tales como depresión, ansiedad y baja autoestima.…”