A lo largo de la lectura de la presente tesis, se le hará evidente al lector el hecho de que este trabajo se sustenta en el esfuerzo, dedicación y apoyo que otras muchas personas le han brindado al autor del mismo para que pudiera llevarlo a cabo de forma exitosa. Por ello, en estas líneas, me gustaría agradecer a todos aquellos que, de una u otra manera me han brindado a mí o a la presente tesis doctoral cualquier tipo de ayuda, personal o profesional, que haya quedado reflejada en mayor o menor medida en cualquiera de las líneas expuestas en el documento que se presenta a continuación. Pido disculpas de antemano por los muchos nombres que se me olvidarán, pero a todos, sabed que os estoy infinitamente agradecido.En primer lugar, debo dar las gracias a mi director de Tesis el Dr. Marcelo E. Domine por su apoyo y confianza desde nuestra primera reunión en septiembre de 2015, por haber visto en mí alguien en que merecía la pena apostar, y por seguir considerándolo así hasta el día de hoy. Por sus consejos, enseñanzas y, en especial, su paciencia conmigo durante todos estos años.En segundo lugar, a la Profesora Patricia Concepción y al doctor Yannick Mathieu.Gracias por toda vuestra ayuda y por todo el conocimiento que habéis volcado en mí.Siempre os voy a considerar referentes y espero teneros siempre cerca, para seguir aprendiendo y, lo más importante, disfrutando de vuestras opiniones, de vuestros consejos y de nuestras discusiones.A los doctores Pascual Oña-Burgos, Daniel Delgado y Luis Miguel Martínez-Prieto (aquí también debo incluir a Yannick). A lo largo de estos años son incontables los momentos que hemos compartido. Vuestro entusiasmo, vuestra pasión a la hora de entender esta profesión han sido, en muchos momentos, la verdadera fuerza motriz de esta Tesis Doctoral. Cada ratito con vosotros ha alimentado mi motivación, gracias además por vuestro cariño y apoyo. He tenido mucha suerte de encontrarme unos amigos tan buenos.A Silvia, una amiga excepcional, siempre dispuesta a escucharme, a apoyarme y a ayudarme. Uno de los grandes tesoros producidos, mejor dicho, descubiertos, en estos años.