Manejo de la ascitis secundaria a cirrosis en el paciente pediátrico. Revisión y recomendaciones
INTRODUCCIÓN L a a s c i t i s s e d e f i n e c o m o l a acumulación patológica de líquido en la cavidad peritoneal.1-3 Es la complicación más frecuente de la cirrosis; su presencia marca un hito en la progresión de la enfermedad y está asociada a mala evolución. 4,5 El trasplante hepático es la opción terapéutica curativa para pacientes cirróticos con ascitis. 6,7 Un tratamiento exitoso de la ascitis puede mejorar la evolución y aliviar los síntomas del paciente cirrótico.8 Existen numerosos artículos y guías de práctica clínica basadas en evidencias para pacientes adultos, pero poco ha sido publicado en la población pediátrica. 2,3,5,6,[8][9][10][11][12][13] Además, consideraciones propias de esta edad dificultan a los pediatras basarse en recomendaciones extrapoladas de la población adulta.2,14 Entre las diferencias, se encuentran las etiologías de la cirrosis, la función renal en relación con la superficie corporal, la distribución corporal del agua, los requerimientos hídricos y nutricionales que deben contemplar el crecimiento, los niveles séricos de creatinina que definen la insuficiencia renal y el tipo de dieta con mayor contenido de sodio y agua libre de solutos.12,15-17 Asimismo, dadas las actuales recomendaciones de las concentraciones de cloruro de sodio (NaCI) en las soluciones de mantenimiento endovenoso, los aportes de sodio por kg también son mayores y pueden alcanzar 15 mEq/ kg/día en lactantes ≤ 10 kg. [18][19][20][21][22][23] Los objetivos de este consenso de expertos son revisar la fisiopatología de la ascitis secundaria a cirrosis y