Los líquidos y electrolitos forman parte de un papel fundamental en un paciente quirúrgico, siendo así de gran importancia para el manejo durante el periodo preoperatorio, durante la cirugía y posterior a ella debido a los cambios que pueden existir en los volúmenes de los mismos. El agua es un componente esencial en el ser humano, representando así el 60% aproximadamente de la masa corporal en los adultos y hasta un 80% en los jóvenes, de este porcentaje los 2/3 corresponden al espacio intracelular y el 1/3 al extracelular. Conocer sobre la distribución de los diversos compartimientos a nivel corporal es indispensable debido a que permite al médico evaluar y prevenir alteraciones a nivel de líquidos o electrolitos e individualizar a cada paciente de acuerdo a sus requerimientos y de esta manera poder administrar los fluidos adecuados. Las soluciones utilizadas para administrar por vía endovenosa se clasifican en cristaloides y coloides siendo su principal diferencia que la una tiene la capacidad de atravesar una membrana dada mientras que la otra no. Los electrolitos son sustancias que están presentes en la sangre y demás líquidos a nivel corporal mismos que poseen una carga eléctrica ya sea positiva o llamados cationes como el sodio, potasio o magnesio,y los de carga negativa o aniones tales como el cloro, bicarbonato, etc. Identificar las alteraciones que se producen ya sea por valores elevados o disminuidos de cada electrolito deben ser identificadas de manera inmediata para evitar complicaciones que pongan en riesgo al paciente.