La transformación tecnológica presente de la educación jurídica, incluidos los modos de instrucción basados en computadores, interactivos y en línea, representa “una de las revoluciones tecnológicas más dramáticas de la historia, si no la más dramática”. A medida que la revolución tecnológica basada en la Inteligencia Artificial se aceleró drásticamente en la década de 1990, muchos comentaristas respondieron a la “expansión comercial de Internet” con una fe utópica en su potencial para igualar y democratizar el conocimiento y el poder. Esta fe dio paso a una segunda ola de comentarios que criticaban los “daños… a grupos históricamente subordinados”, la amenaza de “desinformación” y la polarización de la democracia, la consolidación del poder en Big Tech y en gobiernos autoritarios, y la amenaza a la privacidad en general. Los comentaristas de hoy enfrentan el desafío de determinar si y cómo responder a estos daños y, al mismo tiempo, darse cuenta de los beneficios potenciales de la tecnología impulsada por la IA, especialmente por el impacto y el uso de la tecnología durante la experimentación forzada que ocurrió durante la pandemia de COVD-19. Al evaluar el impacto potencial de la tecnología en la educación jurídica, este documento se enfoca principalmente en la educación jurídica en Estados Unidos, aunque incluiremos algunas ideas comparativas. En la Parte I, situaremos la promesa y el peligro de la tecnología en contexto: cómo funciona la educación jurídica actualmente para mantener la jerarquía y la desigualdad. La Parte II examinará hasta qué punto la educación jurídica en línea está democratizando realmente la educación jurídica. La Parte III explorará el potencial de la tecnología para mejorar la educación jurídica, incluyendo la democratización del conocimiento y del poder jurídicos.