Con sumo interés hemos leído el caso presentado por González Cruz et al., en el que se describe la presentación clínica del síndrome de enterocolitis inducida por proteínas alimentarias (SEIPA), así como su diagnóstico y tratamiento. Nos llamó la atención que los autores describan la prueba de parche como método de corroboración diagnóstica de esa enfermedad. La guía internacional más reciente no pudo realizar recomendación alguna respecto a su uso debido a los resultados contradictorios obtenidos en estudios clínicos. En el consenso español entre pediatras de atención primaria, gastroenterólogos pediatras y alergólogos pediatras no se recomienda la prueba de parche para la confirmación diagnóstica del SEIPA inducido por proteína de la leche de vaca, el desencadenante más común de esta entidad.