Space Making in the Global South: Lessons from the GCC-Mercosur Agreement

Abstract

This article proposes a revised approach to the mainstream definition and understanding of the term ‘Global South’ by anchoring its meaning in a relational view of space. Secondly, it presents the GCC-Mercosur agreement as a case study that illustrates the obstacles involved in the making of spaces in the Global South. The main research question addressed here is: Why has the GCC-Mercosur framework agreement failed to materialize into a meaningful economic space? This question will be answered through David Harvey’s theoretical insights and Doreen Massey’s relational approach to space, as well as post-structural geography. This article argues that the promise of increased trade and investment was the basis on which the GCC-Mercosur economic space was designed, but the narrowness of the framework agreement’s scope and the socio-political relations organized around it have not been able to sustain or strengthen this Global South space. This study employs discourse analysis as its main methodological technique, grounded on a Foucauldian understanding of the empirical properties of discursive activities. It concludes by advocating for the need to incentivize a broader engagement of civil society in the processes of Global South space making.

La red de acuerdos y las negociaciones externas del Mercosur

“…Sin embargo, se debe subrayar que una negociación política puede derivar hacia una comercial: un ejemplo es la interacción con Rusia, que empezó con un acuerdo político en 2006 y, en 2018, se firmó un memorando en cuestiones comerciales. Una red de acuerdos menos profundos se ha establecido en los últimos años, pero hay obstáculos al avance hacia tratados de libre comercioque figuran en los discursos como el reto final de esas interacciones (FERABOLLI, 2021). Sin embargo, se consideraba la existéncia de un patrimonio de relacionamientos ya abiertos con potencialidad de evolucionar a otras cooperaciones (ARAÚJO, 2007).…”

“…Por otro lado, en el esfuerzo de crear más acuerdos, se negoció tratados tanto con Israel cuanto con Palestina (COELHO, 2009), mirando a no sufrir críticas de alinearse a uno u otro lado. Más allá de la esfera político-diplomática, las negociaciones se preocuparon también con la apertura y competición de mercados que podrían o no ser complementarios (D'ELÍA; DUCROS; GALPERÍN, 2009;SANDREY;JENSEN, 2009). Priorizar mercancías fue una característica de los tratados hechos en los años 2000, mientras los acuerdos que están en discusión actualmente incluyen a otros temas, como cooperación política y liberalización de servicios, entre otros.…”