“…Desde esta perspectiva machista, los varones deben dominar, competir, tener fuerza corporal y soportar estoicamente el dolor; por el contrario, la depresión los hace sentirse débiles, cansados, sin energía y con la necesidad de soporte profesional estrechamente asociado al rol femenino (Emslie, Ridge, Ziebland, & Hunt, 2006;Kilmartin, 2005;Möller, Heller, & Paulus, 2006;Rihmer, Rutz, & Pihlgren, 1995).…”