En este trabajo se presenta evidencia de que el cambio climático es un proceso que está en curso y que las poblaciones de árboles forestales son genéticamente diferenciadas en caracteres cuantitativos debido a la adaptación en hábitats específicos. Se discuten en detalle las evidencias de que el desplazamiento del hábitat climático apropiado para especies y poblaciones de árboles forestales, debido al rápido cambio climático, probablemente causará estrés importante a las poblaciones naturales de árboles. Debido a los límites físicos de la migración natural, las poblaciones de árboles serán incapaces de mantenerse acopladas al blanco móvil en el que se convertirá su hábitat climático apropiado. El consiguiente desacoplamiento entre las poblaciones naturales y el clima para el cual están adaptadas, provocará probablemente mayor declinación forestal, como ya está sucediendo en varios bosques del mundo. Con el fin de adaptarse al cambio climático, ¿Qué opciones de manejo forestal se tienen? ¿Cuáles podrían ser las consecuencias de la inacción? Se describe y discute la migración asistida, que consiste en la realineación física de poblaciones naturales con el clima para el cual están adaptadas, mediante la reforestación de los sitios donde se proyecta que el clima propicio ocurrirá en el futuro. Lo anterior se considera una opción de manejo activo para mantener los ecosistemas con árboles sanos en el futuro.