“…Como ha quedado reflejado en la literatura presentada sobre los estudios de mayor impacto llevados a cabo sobre el flipped learning -como praxis innovadora desarrollada en una era donde está en auge el aprendizaje en entornos digitales-se ha constatado en un análisis de contenido que esta modalidad de enfoque metodológico fomenta la efectividad del aprendizaje (He, et al, 2016;Sánchez, et al, 2019), la motivación de los discentes (Thai, et al, 2017;Tse, et al, 2019), su participación en las acciones formativas (Long, et al, 2016), su capacidad de resolver problemas o situaciones de incertidumbre planteadas por el docente (Bognar, et al, 2019) de manera colaborativa, cooperando el grupo de alumnos para alcanzar los objetivos, tanto en el aula física como en los espacios virtuales (Báez y Clunie, 2019;Kwon & Woo, 2017;MacLeod, et al, 2017), contribuyendo estos aspectos de manera positiva en la calificación de los estudiantes (Awidi & Paynter, 2019;Karabulut, et al, 2018;Nortvig, et al, 2018).…”