“…La inclusión de tres nuevos síntomas de TEPT y la configuración de un nuevo grupo (alteraciones persistentes en el estado de ánimo y las cogniciones) significa que el TEPT en el DSM-5 está definido más ampliamente que en el DSM-IV (Smith et al, 2019). Sin embargo, surgen dudas sobre la validez de los criterios diagnósticos en adolescentes (Espinosa et al, 2018;Mikolajewski, Scheeringa, y Weems, 2017), observándose todavía una tasa de infradiagnóstico notable. Diferentes estudios han comparado los criterios DSM-IV con criterios DSM-5 en adolescentes y adultos jóvenes (Carmassi et al, 2013;Elhai et al 2012;Hafstad, Dyb, Jensen, Stienberg, y Pynoos, 2014), y en general sugieren tasas de prevalencia, en algunos casos, sólo ligeramente más altas para el DSM-5.…”