En este artículo se analiza el deterioro electoral del Partido Demócrata Cristiano (pdc) chileno, que cayó del 26% de los votos en las elecciones inaugurales de la democracia en 1989, al 4.2% en las legislativas de 2021. Sugerimos tres factores explicativos. Primero, que si bien la base electoral del pdc siempre fue predominantemente católica, desde mediados de la primera década de los dos mil, los partidos de derecha han competido con dicho partido y con éxito parcial en este núcleo de electores. Segundo, que dicho partido ha sido históricamente de centro, pero desde fines de los noventa ha enfrentado la competencia de los partidos de izquierda por estos votantes. Tercero, que las facciones internas del pdc pasaron de una dinámica cooperativa a una disruptiva, con acelerados cambios de directivas y fuga de militantes. Malos resultados para las elecciones presidenciales de 2017 y 2021, con un 5.9% y un 11.6%, respectivamente.