“…Las diferencias se pueden detectar en la cultura material y en la arquitectura de las viviendas, en los tipos de cultivos (Roig Buxó, 2009) y en la actividad artesanal (Berrica, 2020; Berrica y Schibille, en prensa), que pueden diferenciar un campesino de un comerciante acaudalado o hasta dar cuenta de una elite rural (Berrica, 2021b(Berrica, , 2022dOlmo Enciso, 2015). Investigaciones recientes han evidenciado cómo los asentamientos en altura, fortificados, con probable presencia de aristocracias, eran sedes administrativas y políticas locales secundarias (Berrica, 2022c;Martín Viso, 2015;Martín Viso, Sastre Blanco, Catalán Ramos y Fuentes Melgar, 2020;Olmo Enciso, 2015;Olmo Enciso et al, 2019). Sin embargo, no suplantaron a las ciudades que conservaron un nivel jerárquico primario en la región (Martín Viso, 2014).…”