“…Las bases de datos actuales son el resultado de un gran esfuerzo realizado durante la última década, ya que en años anteriores la información disponible (y gratuita) era más limitada (Martínez-Mayorga, Peppard, Ramírez-Hernández, Terrazas-Álvarez & Medina-Franco, 2014). Esto suponía un problema, ya que una de las principales dificultades al entrenar cualquier modelo de IA es la gran cantidad (y calidad) de datos que son requeridos (Martínez-Mayorga, Rosas-Jiménez, González-Ponce, López-López, Neme & Medina-Franco, 2024). En la actualidad existen numerosos repositorios de acceso abierto, y de acuerdo al tipo de información que contienen, se dividen en tres grupos (Tseng et al, 2023): i) bases de datos con información sobre la composición química de los alimentos, incluyendo nutrientes, compuestos bioactivos y compuestos tóxicos; ii) bases de datos con información sobre los compuestos químicos presentes en los alimentos, incluyendo su estructura química, propiedades y función; por último, iii) los repositorios con información de las moléculas que contribuyen al sabor y olor de los alimentos.…”