La historiografía ha destacado a las reinas de la dinastía atálida gobernante en Pérgamo por su imagen como modelo de feminidad tradicional griega, ampliamente publicitada y usada por la propaganda dinástica, considerándose por lo general que su papel era fundamentalmente pasivo. Sin embargo, Apolonis y Estratonice, además de exhibir en el ámbito público sus virtudes domésticas, hicieron notar en él su agencia e influencia, encuadrándose en el fenómeno general de las transformaciones en las formas de estar las mujeres en público en el mundo helenístico. En este sentido, pudieron ser un referente para los nuevos modelos de feminidad que la cambiante realidad requería, y que fueran perfectamente asumibles por un sistema patriarcal en constante proceso de adaptación.