“…Como ha demostrado el análisis de las tres primeras plantas nucleares españolas (Zorita, Garoña y Vandellós 1), la transferencia de tecnología extranjera implicó un intenso proceso formativo, que solía comenzar en el país suministrador y luego se trasladaba a España, y que afectaba a prácticamente todo el personal: operarios, ingenieros, gestores, legisladores y cien-tíficos de muy diversas especialidades (De la Torre y Rubio- Varas, 2018bVaras, , 2018cSánchez, 2022). Los agentes locales no se limitaron a recibir y replicar las enseñanzas extranjeras, sino que fueron más allá: al adaptarlas y mejorarlas lograron un papel activo en la generación propia de I+D+i, con efectos multiplicadores sobre numerosas actividades y sectores (López y Valdaliso, 2001;Rubio-Varas y De la Torre, 2017;Delgado y López, 2019;Sánchez y López, 2020).…”