A Dios, por tener la maravillosa oportunidad de realizar mis estudios de doctorado en Europa, en mi estancia haber gozado de bendiciones y darme sabiduría para poder elaborar este documento.Al gobierno ecuatoriano, por haber brindado las facilidades de cursar estudios doctorales a miles de ecuatorianos en el exterior, contar que estos aprendizajes y experiencias permitirán el retorno de profesionales con un mejor nivel educativo para el sistema universitario del país.