A lo largo del tiempo, los diccionarios han sido un medio fundamental para la transmisión de conocimiento y herramientas útiles en las tareas de redacción y traducción de textos. Como cualquier otro tipo de texto, se han visto afectados por la errata, un fenómeno universal pero a menudo difícil de determinar, por la imposibilidad de distinguirlo de arcaísmos, variantes formales, cambios ortográficos, cultismos o incluso errores cognitivos. Por otro lado, tradicionalmente se ha visto la errata como un defecto menor en relación con los errores de contenido. Sin embargo, en el lenguaje el fondo y la forma van de la mano, y, además, las erratas de los diccionarios tienen una especial relevancia, dado el prestigio que estos últimos han tenido como obras de referencia a lo largo de los siglos y la proclividad observada en la lexicografía a copiar o reutilizar textos anteriores, con el consecuente riesgo de transmisión. En un trabajo empírico anterior (Rodríguez-Rubio y Fernández Quesada, 2020b), establecimos la importancia del problema de la transmisión de erratas en una colección de diccionarios especializados bilingües contemporáneos conocida como «Diccionarios de Alicante». El objetivo del presente trabajo, de carácter teórico, es verificar si desde los estudios sobre diccionarios de los últimos siglos se ha prestado suficiente atención al fenómeno universal de la errata y a la reproducción de los defectos formales, aspectos fundamentales de la calidad lexicográfica. Concluimos que el tratamiento que se ha dado a dichos fenómenos ha sido fragmentario e insuficiente, por lo que se necesitan investigaciones tanto empíricas como teóricas que abran una nueva línea de investigación en el marco de una crítica lexicográfica constructiva y puedan contribuir a la mejora de obras lexicográficas futuras.