Los proyectos y prácticas educativas de cada época histórica están íntimamente ligados a las formas que adopta el sistema social. Por eso, poco entenderíamos si aceptásemos sin más, como frecuentemente defienden algunos teóricos, un progreso lineal y acumulativo en el ámbito de la educación. [The educational projects and practices of every historical period are intimately linked to the forms adopted by the social system. This is why we will gain little understanding if, as theorists frequently advocate, we simply accept a linear and cumulative progress in relation to the field of education.] (Varela and Álvarez-Uría 1991, 129)