Se estudiaron 136 carcinomas mamarios de perras y sus linfonódulos satélites. Se evaluaron la proliferación celular (mediante la marcación inmunohistoquímica del antígeno nuclear de proliferación celular) y la actividad angiogénica (mediante la inmunomarcación del receptor para el factor de crecimiento de endotelios vasculares 2 -VEGFR-2- y el recuento de microvasos). Se relacionaron ambos procesos y su repercusión en el estado del linfonódulo. Se estableció la asociación entre estas características y el tipo y grado histológicos, y la presencia de émbolos neoplásicos en los vasos tumorales. Para determinar su significación en el pronóstico, estos parámetros se relacionaron con el estado del linfonódulo (merced a la observación de cortes procesados mediante la técnica histopatológica de rutina y a la marcación inmunohistoquìmica de citoqueratinas) y con la supervivencia de un grupo de pacientes. Los tipos histológicos pudieron clasificarse en dos grupos teniendo en cuenta su comportamiento proliferativo, angiogénico e invasivo: uno constituido por carcinomas complejos, simples tubulares y de células escamosas, y el otro por carcinomas simples papilares, sólidos y anaplásicos y carcinosarcomas. A menor diferenciación histológica correspondieron mayores actividades proliferativa, invasiva y angiogénica. Con respecto a esta última, en neoplasias con mayor expresión del VEGFR-2, la densidad de microvasos y la proliferación fueron mayores. La mayor densidad de vasos favorece la invasión vascular. La presencia de émbolos, el grado histológico, el índice de proliferación, la expresión del VEGFR- 2 y la densidad de microvasos permitieron predecir la capacidad metastásica. El tipo histológico no se relacionó con la supervivencia de manera independiente. Los carcinosarcomas y los carcinomas simples anaplásicos presentaron mayor riesgo de metástasis que los carcinomas simples tubulares, complejos y de células escamosas. La probabilidad de supervivencia a 18 meses fue alta y estuvo influenciada por el estado del linfonódulo y la presencia de émbolos neoplásicos.