“…Dicho diagnóstico diferencial debe realizarse con la patología de origen no ginecológico (apendicitis aguda, cólico renal, cólico ureteral y obstrucción intestinal), y con patología ovárica, como son los quistes de Morgagni (4), hidrosalpinx, piosalpinx, cirugía pélvica anterior, quistes ováricos, neoplasias, congestión venosa o trauma (3,5). El síndrome de hiperestimulación ovárica se asocia a un incremento en el riesgo de torsión anexial, por la presencia de ovarios quísticos aumentados de volumen (6).…”