“…Se pueden ver múltiples contribuciones de los autores sobre la aplicación de la racionalidad a las decisiones desde los enfoques más objetivistas y deterministas de las teorías del comportamiento económico (Camerer, 2004), (D´Elia, 2009), (Amaya, 2004), (Abitbol, 2005), (Levine, 2010), (Maletta, 2010), (Navas López, 2010) desde la teoría de los juegos aplicados a la decisión (Sinisterra Paz, 2001), (Juan Pablo, 2009), (Landa Bercebal & Velasco Morente, 2015), mediante utilización de análisis bayesiano (Chichil, 2000), (Arenas Moreno, 2011), (Rodríguez-Ponce, 2007, la aplicación de análisis multifactorial, la adaptación de modelos de lógica difusa al proceso decisorio (Gómez-Gómez, 2016), (Córdova, 2017), (Laura, 2000), mediante el uso de sistemas expertos de apoyo a la decisión (Flores & Hadfeg, 2017), (Pérez-Teruel, Leyva-Vázquez, & Estrada-Sentí, 2015), (Torres Navarro & Córdova Neira, 2014), los desarrollos de algoritmos genéticos aplicados a la decisión (Icarte Ahumada, 2016), (Bello, Lugo, García, & Bello, 2016), Giraldo & Gómez Perdomo, 2013), finalmente el uso de la simulación computadorizada de procesos de decisión (Gil González, Manyoma Velásquez, & Orejuela Cabrera, 2016), (Gómez, Andrade, & Vásquez, 2015), (Navas & Perales, 2014).…”