El catastro consiste en el levantamiento de información física, jurídica y económica de los predios, lo que permite a los municipios y al país mantener actualizadas las bases de datos prediales en cuanto a su ubicación, área, forma, acceso, valor catastral y situación legal. Este es el soporte a partir del que se generan políticas públicas, inversiones, ordenamiento territorial y obras de infraestructura. Hoy día, el catastro rural presenta un grado de desactualización cercano al 95 %, lo que demuestra que los procesos, normas y uso de los recursos no se están utilizando con eficiencia, lo que impacta de manera directa proyectos territoriales locales y regionales. Por esta razón, el reto del catastro multipropósito radica en una nueva reglamentación que incluya la descentralización en la ejecución del catastro, la contratación por gestores catastrales y su transformación en un servicio público. Asimismo, con la metodología planteada se busca evidenciar que, con la participación directa del propietario en el desarrollo del proceso, se obtendrían resultados eficientes en el mediano plazo